Óscar Arias, expresidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz, asegura que no le preocupa que Estados Unidos le haya revocado su visa. A sus 84 años, y con una trayectoria política marcada por el liderazgo y la diplomacia, Arias considera que esta medida podría estar motivada por sus críticas a la administración de Donald Trump.
“Cualquiera que critica a Trump se convierte en su enemigo”, afirma Arias en una conversación con BBC Mundo.
Aunque el Departamento de Estado de EE.UU. se negó a divulgar los motivos de la revocación, alegando confidencialidad, el expresidente costarricense tiene sus propias hipótesis. Cree que sus posturas sobre temas como el aumento del gasto militar estadounidense, el vínculo con China, y su abierta crítica al estilo de gobernar de Trump podrían haber influido.
Además, Arias compara al expresidente estadounidense con su sucesor costarricense, Rodrigo Chaves:
“En lugar de adversarios democráticos, los críticos se convierten en enemigos.”
Relación tensa con EE.UU. desde los 80
Óscar Arias no es ajeno a las tensiones diplomáticas. Recuerda cómo en 1986 ya enfrentó roces con el entonces presidente Ronald Reagan. Hoy, décadas después, vive una nueva etapa de distanciamiento con Washington.
Según el propio Arias, no ha recibido explicaciones oficiales más allá de una escueta notificación electrónica. “Solo me informaron que tengo derecho a volver a solicitar la visa. Pero no lo he considerado”, añade.
¿Castigo político por vínculos con China?
Arias también menciona que varios diputados opositores costarricenses habrían enfrentado la misma situación tras criticar un decreto que excluía a Huawei de participar en una licitación tecnológica para redes 5G.
Aunque evita confirmar si su caso está directamente relacionado, la coincidencia le parece significativa.