Jueces y ministros deciden unirse al paro en contra de la reforma judicial con una votación abrumadora: 86% a favor y 14% en contra.
La suspensión de labores comenzará a partir de las 00:00 horas de este miércoles 21 de agosto y se mantendrá “hasta que se cumplan nuestras demandas”.
La Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (JUFED) decidió este lunes unirse al paro nacional del Poder Judicial, después de someter la decisión a votación.
Con 1,202 votos a favor y 201 en contra, este miércoles se iniciará la suspensión de actividades en todos los juzgados y tribunales del país.
La JUFED señaló que esto representa un 86% de votos a favor y un 14% en contra, de un total de 1,403 votos registrados este lunes.
Con esta decisión, la suspensión de labores comenzará a las 00:00 horas del miércoles 21 de agosto de 2024 y se mantendrá “hasta que se cumplan nuestras demandas”.
La votación se realizó de manera digital, mediante un enlace electrónico enviado a los correos institucionales, desde las 9:00 de la mañana hasta las 8:00 de la noche. Se garantizó el anonimato total en la votación.
La JUFED indicó que el acta de cómputo de votos constituye un mandato general para declarar la suspensión de actividades jurisdiccionales.
“Las personas trabajadoras y juzgadoras hemos decidido defender en unidad: la República, la independencia judicial y la división de poderes, para garantizar el futuro de las próximas generaciones”, añadió.
Según la organización, la suspensión busca que “se respete el Estado de derecho mediante la garantía de la independencia judicial, y que no se ponga en riesgo la carrera judicial mediante la elección por voto popular para acceder a los cargos de jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial de la Federación”.
Además, “las personas juzgadoras pedimos al Congreso que detenga el actual proceso de reforma, dadas sus múltiples imperfecciones, para reorientar la discusión pública hacia una reforma integral, bien meditada, que aborde las causas estructurales que han venido debilitando sostenidamente la calidad de la justicia”.
Argumentaron que la votación era necesaria para “obtener el respaldo de la mayoría de los y las titulares de los órganos jurisdiccionales federales, y así tener la legitimidad que nos fortalezca frente a los poderes Ejecutivo y Legislativo, pero sobre todo, por la atención y respeto que la sociedad en general merece”.