Escoltado por los senadores morenistas Óscar Cantón Zetina y Félix Salgado Macedonio, el recién asumido senador del PAN, Miguel Ángel Yunes Linares, dejó abierta la incógnita sobre si apoyará o no la reforma judicial. Yunes anunció que será durante el debate en el pleno cuando exprese su posición final.
El panista subrayó en varias ocasiones su derecho a la libertad de voto y rechazó actuar como un “borrego”, además de expresar su molestia hacia el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, criticando sus amenazas de expulsión. Yunes lanzó duros comentarios hacia Cortés, atribuyéndole la derrota del PAN en las elecciones pasadas: “La derrota de la elección anterior es una derrota histórica atribuible a Marko, y él se aprovechó de su posición como presidente para encabezar la lista plurinominal”.
Al rendir protesta como suplente de su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez, Yunes Linares enfatizó que no ha habido negociaciones con el gobierno federal, negando cualquier acuerdo a cambio de su voto. Explicó que su hijo no pudo asistir debido a problemas de salud relacionados con su columna vertebral.
Durante su llegada al pleno del Senado, fue recibido con aplausos por senadores de Morena, incluidos gestos de apoyo del coordinador de la bancada morenista, Adán Augusto López Hernández. Sin embargo, la reacción de sus compañeros panistas fue diferente; la senadora Lilly Téllez le lanzó 30 monedas y lo acusaron de “traidor”.
En tribuna, Yunes Linares declaró que “nadie nos va a obligar a votar a favor o en contra” de la reforma, aunque evitó confirmar si se alineará con el bloque oficialista o la oposición. Su decisión será revelada en el pleno.
Además, aprovechó la ocasión para cargar nuevamente contra Marko Cortés, quien había calificado de traidores tanto a él como a su hijo. “Nosotros nunca hemos traicionado nuestros principios”, aseguró Yunes, respondiendo a los señalamientos del dirigente panista, quien previamente le había recriminado su falta de comunicación.
Finalmente, Yunes Linares ofreció una conferencia de prensa acompañado por Salgado Macedonio y Cantón Zetina, reafirmando sus posturas y dejando su voto en el aire.