Más de mil 300 elementos de la Guardia Real participaron en la mayor bienvenida militar recordada para una visita de Estado
El rey Carlos III recibió este martes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con una ceremonia militar sin precedentes en el castillo de Windsor, en las afueras de Londres.
Ambos llegaron en una carroza cerrada tirada por seis caballos blancos desde Casa Victoria, acompañados por la reina Camila y la primera dama, Melania Trump. También estuvieron presentes los príncipes de Gales, William y Kate, quienes siguieron el acto desde el patio.
“La magnitud de la ceremonia militar ofrecida al presidente estadounidense marca la mayor bienvenida de Estado en la historia reciente del Reino Unido”, señalaron medios locales.

Un despliegue sin precedentes
Durante el acto se escucharon los himnos nacionales de ambos países antes de pasar revista a la Guardia Real. En total, participaron 1,300 miembros del ejército británico, además de 160 efectivos de la Marina Real Británica y 140 de la Real Fuerza Aérea (RAF).
La Artillería de Caballería del Rey disparó 41 salvas con cañones de la Primera Guerra Mundial desde los jardines del castillo, mientras Trump saludaba a los monarcas.

Contexto de la visita
Esta es la segunda visita de Estado de Trump al Reino Unido, después de la realizada en 2019 durante su primer mandato. Sin embargo, la presencia del mandatario republicano en territorio británico no ha estado libre de polémica: se espera una manifestación en Londres en rechazo a su visita.
“La ceremonia en Windsor no solo reafirma la alianza bilateral, también simboliza la relevancia del protocolo militar en la diplomacia internacional”, afirmó un analista consultado por BBC.