El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha anunciado planes para presentar una ley sobre la eutanasia en abril, pero con condiciones estrictas para su aplicación.
En una entrevista conjunta con las publicaciones “La Croix” y “Libération”, Macron aclaró que la ley que será presentada al Parlamento no se trata de un “suicidio asistido”.
El presidente detalló que el proyecto establece una serie de criterios restrictivos, distanciándose así de la legislación suiza, país que recientemente permitió la muerte asistida del cineasta parisino Jean-Luc Godard (91 años).
Macron enumeró cuatro condiciones: será exclusivamente para adultos; los pacientes deben tener capacidad de discernimiento (lo que excluye a aquellos con Alzheimer); deben padecer una enfermedad incurable con pronóstico fatal a corto o mediano plazo; y se evaluará el sufrimiento físico y psicológico del paciente.
“Se trata de una ley de fraternidad, ya que permite elegir lo menos malo cuando la muerte está cerca”, declaró Macron.
El presidente explicó que el texto será revisado por el Consejo de Estado para verificar su conformidad con la Constitución, y se presentará en el Consejo de Ministros en abril, con una primera lectura prevista para mayo.
“No vamos a solicitar un proceso urgente para un texto con tantos desafíos”, aseguró el mandatario, quien evitó especular sobre cuándo podría ser aprobada la ley.
El partido de Macron, Renacimiento, y sus aliados tienen una mayoría relativa en la Cámara Baja y necesitarán apoyo tanto de la izquierda como de la derecha para aprobar la normativa, algo que no está garantizado.
Francia ya cuenta con una legislación de 2016 que permite a pacientes en estado terminal suspender el tratamiento y recibir cuidados paliativos.
Según encuestas del gobierno, el 70% de los franceses están a favor de legalizar la eutanasia.
Jean-Luc Romero-Michel, presidente de honor de la Asociación Francesa en Favor del Derecho a Morir Dignamente, celebró que el proyecto finalmente vaya al Parlamento, pero criticó que la decisión final recaiga únicamente en un equipo médico.
“Esto no ocurre en ningún país con regulación de la eutanasia”, dijo Romero-Michel a “Franceinfo”, expresando su confianza en que los parlamentarios modifiquen el proyecto original para facilitar el acceso.