Los gravámenes anunciados por Donald Trump no aplican a productos cubiertos por el T-MEC
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una nueva ronda de aranceles del 25 % a camiones medianos y pesados, y del 10 % a autobuses, como parte de una estrategia para fortalecer la manufactura nacional. Sin embargo, México quedó exento de la medida debido a su cobertura dentro del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
De acuerdo con la proclama firmada el viernes por el mandatario, los nuevos impuestos entrarán en vigor el 1 de noviembre y forman parte de una política de estímulo a la producción doméstica de autopartes y vehículos.
“La guerra de aranceles no busca castigar, sino incentivar que las fábricas regresen a Estados Unidos”, indicó un alto funcionario del gobierno estadounidense bajo condición de anonimato.
Reembolsos ampliados y alivio a fabricantes
Trump también anunció la extensión hasta 2030 del reembolso del 3.75 % sobre el precio de venta de vehículos ensamblados en territorio estadounidense. Dicho incentivo, originalmente temporal, buscaba compensar el impacto de los aranceles sobre piezas importadas y promover la relocalización industrial.
El beneficio ahora se aplicará también a fabricantes de camiones y motores, según fuentes oficiales.
“Este ajuste refleja nuestro compromiso con la industria automotriz nacional y con mantener empleos en territorio estadounidense”, señaló la Casa Blanca.
México y el T-MEC, fuera del impacto inmediato
Los nuevos gravámenes no se aplican a las importaciones cubiertas por el T-MEC, vigente desde 2020 y cuya renegociación está prevista para 2026. Esto significa que, por el momento, las exportaciones mexicanas de camiones y autobuses no enfrentarán los nuevos aranceles.
La decisión se produce en un contexto de alza de precios en el sector automotor: según Kelley Blue Book, el precio promedio de un auto nuevo alcanzó en septiembre los 50 080 dólares, un incremento del 3.6 % anual.
“La extensión de los reembolsos busca mitigar el impacto inflacionario en el mercado automotriz”, explicaron funcionarios estadounidenses.